Como es ya tradición, durante el encuentro se entregaron los diplomas de Bodas de Oro a aquellos socios que este año han cumplido 50 años ininterrumpidos desde su ingreso, y en esta ocasión, se les obsequió una edición especial de la corbata con el logo del Centenario.

El ahora Licenciado Benjamín Chico Ocampo, en representacipon de los jóvenes graduados, compartió con los presentes la alegría de sentirse parte del Club, el que considera su segundo hogar, recalcando los lazos de amistrad que el deporte le permitió forjar, el rugby especialmente

El Cdor. Gonzalo Tarasido manifestó su experiencia con el Club, también con el rugby, que le permitió consolidar los valores que aún hoy lo acompañan, haciendo referencia a aquellos líderes que lo han guiado en las distintas etapas de su vida. Recordó su paso dirigencial y destacó la importancia, en lo personal e institucional, de la defensa del deporte amateur, del deporte como un medio, y no como un fin

El Dr. Federico Cicardo remarcó lo especial de esta comida tradicional en medio de los festejos. Agradeció todos los reconocimientos, internos y externos: el de los socios, de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el del Senado de la Nación y de los Clubes amigos que nos acompañaron en el Cocktail, y sobre todo el de los empleados. Todos ellos son reconocimientos a la historia y al presente, que nos deben hacer pozar la mirada sobre el futuro, el que encuentra al Club con enormes desafíos, como son: abordar el crecimiento que se viene evidenciando, generar nuevos y más  dirigentes y  la reforma estatutaria propuesta por la Comisión Directiva para la incorporación de las mujeres como socias plenas, desafió este último, para el cual debemos aferrarnos a los valores de unidad, de diálogo y de inexistencia de diferencia generacional, en la búsqueda de consensos.